"Estamos estancados".

En sus brazos encontré el amor y así mismo, la guerra.

En ese momento, en ese lugar, estaba en mi propio paraíso y en su respectivo infierno.
Puedo jurarles que Dante se hubiera reído de su infierno si hubiera vivido el mío.

Yo era un cuerpo de esperanzas vacías  porque algún día cayeran sus muros anti sentimientos, él ya tenía su decisión.

Por primera vez su tacto me dolía, o me dolía que fuera el último.


Creo que uno necesita ordenar su vida, volver a estar a gusto en el lugar donde está parado y el otro necesita madurar para entender mejor las cosas y las relaciones.
En cuanto ambas partes se cumplan, sólo queda que el universo reúna de nuevo a esas dos personas. O no, capaz esto es definitivamente el fin, quien sabe.

Sólo tengo una petición: No te olvides de mi. En cuanto lo hagas, ya no voy a creer en la posibilidad de un reencuentro. Y te miento si te digo que no soñé con el "avanzar un paso". Pero no estás listo para eso... O no conmigo.



Me enamoré de alguien al cual no pude decírselo porque sabía que no era mutuo.
Ahora hay que desenamorarse y seguir.