The right place
-Creo que hay muchos puntos importantes con los cuales debemos trabajar. Por ejemplo, el lugar de "La mujer que lo puede todo" ya no te está funcionando, ¿o si? Tenes que aprender a pedir y con eso me refiero a todo o a cualquier cosa, eh, desde ayuda hasta las respuestas que te hagan falta sobre algo. Aprender a preguntar, a decir "¿Que te pasa conmigo? ¿Que sentís por mí? ¿Que lugar ocupo en tu vida?". Aprender a darle lugar al otro, no muevas todas las montañas vos, pero por sobre todo, creo que tenes que aprender a ponerle un lugar a las cosas y a las personas.
-Fracción de una charla con mi psicóloga.
«Ponerle lugar a las cosas y a las personas...»
Empezar terapia nunca es fácil por el simple hecho de que es comenzar a hablar de cosas que creías tener resueltas. Bah, desde mi punto es volver a hablar de algo que pensaba ya finalizado, pero no..
Me quedó dando vueltas eso de "ponerle lugar a las cosas y a las personas" por el simple hecho de que gran parte de mis errores puedo decir que fueron por poner una situación en el lugar equivocado. Si todavía la idea no se entiende, lo hago más simple. "Ponerle lugar a las cosas y a las personas" implica ponerse a pensar que lugar le estamos asignado a las personas y actividades que tenemos en nuestra vida y replantearse si realmente es donde pertenecen. Si alguien hace ballet por el simple hecho de utilizarlo como entrenamiento físico es controversial que se frustre porque no baila como un profesional, como primer ejemplo que se me viene. A la hora de las relaciones es lo mismo, es replantear si la persona con la que estamos/estamos conociendo quiere lo mismo que nosotros y que lugar ocupa en nuestra vida. Alguien con intenciones amorosas no puede estar en un lugar de "amigo" porque va a querer más y va a tener razón, y su inversa también. Un amigo no puede estar en el plano amoroso porque ya pasa a estar en otra categoría (amigos con derechos o como quieran decirle). Es hora de empezar a replantearse que lugares le estamos asignando a las personas, si son los indicados y sobre todo, si ambas partes están de acuerdo con ese lugar. Las relaciones se pueden confundir fácilmente y las probabilidades de que alguien salga herido si no se dejan las cartas sobre la mesa pueden incrementar a niveles inmensos.
Alguien que sabe que lugares ocupan las personas y las actividades de su vida es alguien que vive en paz, y a decir verdad, todos merecemos un poco de paz.
-Fracción de una charla con mi psicóloga.
«Ponerle lugar a las cosas y a las personas...»
Empezar terapia nunca es fácil por el simple hecho de que es comenzar a hablar de cosas que creías tener resueltas. Bah, desde mi punto es volver a hablar de algo que pensaba ya finalizado, pero no..
Me quedó dando vueltas eso de "ponerle lugar a las cosas y a las personas" por el simple hecho de que gran parte de mis errores puedo decir que fueron por poner una situación en el lugar equivocado. Si todavía la idea no se entiende, lo hago más simple. "Ponerle lugar a las cosas y a las personas" implica ponerse a pensar que lugar le estamos asignado a las personas y actividades que tenemos en nuestra vida y replantearse si realmente es donde pertenecen. Si alguien hace ballet por el simple hecho de utilizarlo como entrenamiento físico es controversial que se frustre porque no baila como un profesional, como primer ejemplo que se me viene. A la hora de las relaciones es lo mismo, es replantear si la persona con la que estamos/estamos conociendo quiere lo mismo que nosotros y que lugar ocupa en nuestra vida. Alguien con intenciones amorosas no puede estar en un lugar de "amigo" porque va a querer más y va a tener razón, y su inversa también. Un amigo no puede estar en el plano amoroso porque ya pasa a estar en otra categoría (amigos con derechos o como quieran decirle). Es hora de empezar a replantearse que lugares le estamos asignando a las personas, si son los indicados y sobre todo, si ambas partes están de acuerdo con ese lugar. Las relaciones se pueden confundir fácilmente y las probabilidades de que alguien salga herido si no se dejan las cartas sobre la mesa pueden incrementar a niveles inmensos.
Alguien que sabe que lugares ocupan las personas y las actividades de su vida es alguien que vive en paz, y a decir verdad, todos merecemos un poco de paz.
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